Las relaciones positivas entre padres e hijos se basan en un tiempo de calidad.
El tiempo que pasamos juntos es cómo puedes conocer las experiencias, pensamientos, sentimientos e intereses cambiantes de los demás. Esto es genial para su relación con su hijo.
El tiempo de calidad puede ocurrir en cualquier momento y en cualquier lugar, en medio de días y situaciones normales. Puede ser una risa compartida cuando está bañando a su niño o una buena conversación en el auto con su hijo adolescente.
Cuando pasa tiempo de calidad con su hijo, está demostrando que la valora y aprecia. Puede aprovechar el tiempo de calidad para comunicar mensajes positivos poderosos con sus sonrisas, risas, contacto visual, abrazos y toques suaves.
Trate de planificar un tiempo regular de uno a uno con cada uno de sus hijos. Los niños tienen personalidades diferentes, y algunos niños pueden necesitar menos tiempo que otros, pero todos se beneficiarán de un tiempo especial con usted. Es posible que no tenga mucho tiempo para estar con sus hijos en días ocupados, pero es bueno tener interacciones más largas cuando pueda.
El tiempo que pasa con su hijo también hace una diferencia en la forma en que aprende. Por ejemplo, el tiempo que pasa hablando con su hijo en los primeros tres años de vida lo ayuda a aprender el lenguaje.